miércoles, 22 de febrero de 2017

La Marchas de la Dignidad vuelven a las calles el 25 de febrero


MANIFESTACIÓN MARCHAS DE LA DIGNIDAD
 SÁBADO 25 DE FEBRERO 18,30H

ATOCHA-SOL



¡LA LUCHA ES EL ÚNICO CAMINO!



Esta vez daremos prioridad al ataque que nos tienen preparado contra las Pensiones Públicas, a la defensa de los Servicios Públicos como derechos esenciales de todas las personas, a la eliminación del artículo 135 de la Constitución y el NO al pago de la Deuda ilegítima. Ello además de todas las reivindicaciones incluidas en nuestro Manifiesto, entre las que siempre será prioritaria la del fin de la represión a las personas por luchar y la Amnistía Social para todas las que están encarceladas, encausadas, perseguidas…

La CGT, junto a las Marchas de la Dignidad, volverá a las calles el día 25 de Febrero para exigir “Pan, Trabajo, Techo y Dignidad” para todas las personas que forman la mayoría social, la clase trabajadora, la población en general que sufre el saqueo de las arcas públicas por parte de empresarios y políticos sin escrúpulos desde que comenzó la Crisis-Estafa.

Nuevamente nos movilizaremos de forma descentralizada en todo el territorio del estado, en multitud de ciudades y pueblos, con la participación de colectivos en conflicto de muchos sectores, personas trabajadoras, en activo o en situación de desempleo, estudiantes, pensionistas, colectivos feministas, migrantes, personas usuarias de los servicios públicos, sindicatos alternativos, partidos políticos de la nueva y vieja izquierda, etc…

Las Marchas de la Dignidad constituyen un movimiento muy plural de organizaciones y colectivos, de diferentes procedencias ideológicas y geográficas, aunque todas situadas en el ámbito de la izquierda, cuya capacidad de movilización se ha demostrado a lo largo de estos años de crisis-estafa, cuando los sindicatos del régimen han permanecido escondidos. Su Manifiesto reivindicativo es el más amplio, contundente y completo de cuantas plataformas hay funcionando actualmente en el estado español. Su recorrido no ha estado exento de dificultades, debates, intentos de manipulación política, etc…, dada su diversidad e implantación geográfica pero, hasta ahora, el movimiento siempre ha salido reforzado después de abordar estos desencuentros.